Una familia formada por la cabeza del hogar que es el padre llamado Rodrigo, la madre llamada Juana y la hija llamada Patricia, pero la conocían como Patri.
Un día mientras cenaban en el comedor de pronto salió una luz brillante de la ventana que daba al patio trasero. Salimos para ver de donde venía esa luz y vimos un platillo volante una luz amarillenta que se posó sobre mi padre y mi padre se elevó hacia el omni, luego sobre mi madre y a ella también la elevó. Yo pensé en salir corriendo para que no me cogiesen a mí también, pero no iba a dejar solos a mis padres, entonces me dejé inducir. Cuando subí estaba todo blanco y apenas se podían diferenciar las paredes.
Ellos eran unos seres feos, pequeños y bastante cabezones de color azul. Intentaron durante mucho tiempo hablar con nosotros pero no les emprendíamos hasta que me fijé en un signo que estaba colgando de la pared (Z). Me sorprendió bastante ya que ellos nos hablaban en un idioma totalmente distinto hasta que fui capaz de señalar el signo y dije hola me entendieron desde el principio y me contesto entonces mis padres se dieron cuenta de que podían hablar con ellos y los convencieron de que nos dejaran volver a irnos con la condición de no contar lo que había pasado esa noche.
Cuando regresaron a casa dejaron pactado de que no iban a volver a hablar de esa noche nunca mas y hacer como si nada hubiera ocurrido.
que bonito
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